Depresión perinatal: Britney Spears tiene miedo
Depresión perinatal: En un largo post en Instagram, el icono del pop se abrió sobre las luchas con la depresión perinatal durante los embarazos anteriores, diciendo que era «absolutamente horrible».
La cantante Britney Spears anunció el lunes que está embarazada de su tercer hijo, cinco meses después de que terminara su polémica tutela que le impedía tener más hijos.
«Las mujeres no hablaban de ello en aquel entonces… algunas personas consideraban peligroso que una mujer se quejara así con un bebé dentro… pero ahora las mujeres hablan de ello todos los días… gracias a Jesús no tenemos que mantener ese dolor como un secreto reservado», escribió la estrella del pop.
Según el Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de EE.UU., la depresión perinatal es una de las complicaciones más comunes del embarazo y el posparto, y afecta a una de cada siete mujeres.
Conozcamos más sobre la depresión perinatal, qué es, qué la causa y cómo se puede tratar:
¿Qué es la depresión perinatal?
Según el Instituto Nacional de Salud Mental (NIMH), la depresión perinatal es un trastorno del estado de ánimo que puede afectar a las mujeres durante el embarazo y después del parto.
La palabra «perinatal» se refiere al tiempo anterior y posterior al nacimiento de un hijo. El término depresión perinatal incluye la depresión que comienza durante el embarazo, llamada depresión prenatal, y la depresión que comienza después del nacimiento del bebé, llamada depresión posparto.
Las madres experimentan sentimientos de extrema tristeza, ansiedad y fatiga que pueden dificultar la realización de las tareas diarias, incluido el cuidado de sí mismas o de otras personas.
En raras ocasiones, si los síntomas son lo suficientemente graves, la salud de la madre y del bebé puede estar en peligro.
¿Qué la causa?
No tiene una única causa. Según el NIMH, está causada por una combinación de factores genéticos y ambientales.
Es importante tener en cuenta que las mujeres no tienen la culpa de tener una depresión perinatal: no se produce por nada que la madre haya hecho o deje de hacer.
Los acontecimientos vitales que causan estrés, como la presión laboral o las experiencias de traumas pasados, las exigencias físicas y emocionales de la maternidad y el cuidado de un recién nacido, y los cambios hormonales durante y después del embarazo pueden contribuir al desarrollo de la depresión perinatal.
Las mujeres con antecedentes personales o familiares de depresión o trastorno bipolar o las que tienen antecedentes de depresión perinatal con un embarazo anterior corren un mayor riesgo de desarrollarla.
¿Cuáles son los signos y síntomas?
Los síntomas pueden variar de una mujer a otra. Mientras que algunas pueden experimentar sólo unos pocos síntomas, otras pueden experimentar varios de ellos.
A continuación se enumeran algunos de los síntomas más comunes de la depresión perinatal:
- Estado de ánimo persistentemente triste, ansioso o «vacío».
- Irritabilidad
- Sentimientos de culpa, inutilidad, desesperanza o impotencia
- Pérdida de interés o placer en las aficiones y actividades
- Fatiga o disminución anormal de la energía
- Sensación de inquietud o dificultad para permanecer sentado
- Dificultad para concentrarse, recordar o tomar decisiones
- Dificultad para dormir (incluso cuando el bebé está durmiendo), despertarse temprano por la mañana o dormir demasiado
- Apetito anormal, cambios de peso o ambos
- Dolores, cefaleas, calambres o problemas digestivos que no tienen una causa física clara o que no se alivian incluso con tratamiento.
- Dificultad para establecer un vínculo afectivo con el nuevo bebé.
- Dudas persistentes sobre la capacidad de cuidar al nuevo bebé
- Pensamientos de muerte, suicidio o de hacerse daño a sí misma o al bebé
¿Cómo se puede tratar la depresión perinatal?
Suele tratarse mediante terapia o medicación, o una combinación de ambas.
En los casos en que los dos métodos de tratamiento no ayudan, un experto médico puede sugerir terapias de estimulación cerebral.
El tratamiento profesional es fundamental para la recuperación en los casos de depresión perinatal. Sin embargo, los familiares y amigos también deben animar a la madre a hablar con un médico o un psicólogo, ofrecerle apoyo emocional y ayudarle en las tareas diarias, como el cuidado del bebé o del hogar.
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